El chocolate, un alimento tóxico para perros y gatos

El chocolate, un alimento tóxico para perros y gatos

En forma de huevos, conejos y bombones, el chocolate es un alimento irresistible no solo para niños y adultos, sino también para las mascotas. En los momentos donde el chocolate se convierte en protagonista en nuestro hogar, es importante saber por qué esta delicia es un alimento tóxico para perros y gatos.

Muchas veces, solo basta con una simple mirada para cumplirles el capricho a nuestras mascotas y darles ese pedazo de chocolate que tanto están deseando. Creemos que, si es poquito, no les va a hacer nada. Sin embargo, nos olvidamos que el chocolate es un alimento tóxico para perros y gatos, más bien supertóxico, y que es fundamental evitar el consumo.

¿Querés saber por qué? Más abajo te contamos todo.

¿Por qué el chocolate es un alimento tóxico para perros y gatos?

El chocolate contiene teobromina, un compuesto químico que los perros y los gatos no pueden metabolizar al igual que los humanos. Lo hacen más lento, por lo que su organismo puede alcanzar un alto grado de intoxicación como consecuencia.

La teobromina pertenece a la familia de las metilxantinas, donde también podemos encontrar a la cafeína. Este compuesto estimula el sistema nervioso y provoca esa sensación de placer cuando comemos chocolate.

¿Todos los chocolates son igual de tóxicos? No, dependiendo del tipo de chocolate va a ser más o menos tóxico, aunque esto no quiere decir que las mascotas pueden consumir algunos.

Alimento tóxico para perros y gatos: ¿cómo se define el nivel de intoxicación por chocolate?

El nivel de intoxicación se define por el contenido de metilxantinas que tiene cada tipo de chocolate. De acuerdo con el análisis de Ahlawat, la dosis letal en humanos puede ser de 1000 mg/kg, en gatos de 200 mg/kg y en perros de 300 mg/kg.

Para entender un poco el nivel de intoxicación, les dejamos un cuadro en el que se muestra la concentración de metilxantinas de acuerdo al tipo de producto derivado del cacao.

Alimento tóxico para perros y gatos: el chocolate y las predisposiciones de las mascotas

Es importante dejar en claro que NO se debe dar chocolate, aunque la dosis sea mínima. No podemos saber nunca la susceptibilidad que pueda tener el perro o gato en particular, por lo que no debemos arriesgar su vida.

Sin embargo, los perros son lo que vemos con mayor frecuencia en las clínicas con este tipo de intoxicación, dado que les atrae mucho el chocolate. ¡Si lo tienen a su alcance, lo van a comer seguro!

Si bien no afecta de igual manera a todos, esto va a depender de varios factores.

Peso

Cuanto más chico en tamaño, las dosis mínimas son más chicas, por lo que se llega antes a la toxicidad. Es decir, a menor peso, mayor efecto.

Metabolismo y patologías

En el caso de un cachorro, está directamente asociado con el peso, por lo que a menor peso, mayor efecto y en el caso de un geronte (perro/gato mayor de 7 años) dependerá de varios factores como por ejemplo: patologías asociadas, peso, metabolismo, etc. A medida que los perros y gatos avanzan en edad, sus órganos y funciones se ralentizan por lo que es probable que el metabolismo sea más lento y genere mayor toxicidad. Pero esto dependerá.

Razas

Los perros afectados con mayor frecuencia son los de razas «braquicéfalas», que significa «de cabeza corta», como por ejemplo el carlino, el bóxer o el bulldog debido a que son las más propensas a tener alteraciones respiratorias.

Alimentos tóxicos para perros y gatos: ¿cuáles son los síntomas de una intoxicación por chocolate?

Al cabo de unas pocas horas tras la ingesta de chocolate, entre 6 a 12 horas, el perro experimentará irritación estomacal, que a su vez le provocará vómitos y diarrea, y la posibilidad de que a largo plazo surjan úlceras en el estómago.

En caso de ingerir grandes cantidades de chocolate, la teobromina pasará a la sangre del perro, lo que provoca alteraciones del ritmo cardíaco y temblores. Como consecuencia, se pueden producir convulsiones, un coma o muerte en los casos más graves. El tratamiento de la intoxicación depende de la gravedad de los síntomas, pero es fundamental acudir rápidamente al veterinario.

Los signos pueden durar 24 a 72 horas debido a la larga vida media de la teobromina en perros, que es de 17,5 horas, en contraste a lo que ocurre en los humanos, que ocurre de 2 a 3 horas. Estos varían de trastornos gastrointestinales a efectos cardiovasculares (taquicardia, hipertensión o hipotensión y arritmias) a signos del sistema nervioso central (agitación, estimulación, hiperactividad, temblores y convulsiones).

Los primeros síntomas en aparecer generalmente son polidipsia, vómitos, diarrea, distensión abdominal e inquietud; progresivamente habrá hiperactividad, poliuria, ataxia, rigidez, temblores y convulsiones. Luego se produce taquicardia, contracciones ventriculares prematuras, taquipnea, cianosis, hipertensión, hipertermia, bradicardia, hipotensión o coma. La hipocalemia puede ocurrir posteriormente en el curso de la toxicosis, lo que contribuye a la disfunción cardíaca.

La muerte se debe generalmente a arritmias cardiacas, hipertermia o insuficiencia respiratoria. El alto contenido de grasa de los productos de chocolate puede desencadenar pancreatitis en animales susceptibles.

Los síntomas están sujetos de acuerdo a la dosis ingerida. Los síntomas leves como vómitos, diarrea y polidipsia aparecen en los perros que ingieren 20 mg/kg; los efectos cardiotóxicos se pueden observar en dosis de 40 a 50 mg/kg, y las convulsiones pueden ocurrir en dosis mayor o igual a 60 mg/kg. Dosis más altas causan la muerte en horas.

¿Qué hacer en caso de intoxicación?

Si se observan alguno de estos síntomas tras el consumo de chocolate, es fundamental recurrir lo más rápido a un veterinario. Dependiendo del nivel de intoxicación, el veterinario dará un diagnóstico y tratamiento determinado.

En conclusión, NO DEBEMOS DARLE CHOCOLATE A LOS PELUDOS. Durante las fechas donde el chocolate es protagonista, es súper importante esconderlos en lugares donde los no puedan alcanzarlos y estar muy atentos ante cualquier comportamiento extraño o síntoma que aparezca.

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