Los perros de la Reina de Inglaterra

Los perros de la Reina de Inglaterra

Queen Elizabeth II, la reina de Inglaterra, tuvo su primera Corgi a los 18 años. Se lo regaló su padre, el rey, y la nombraron Susan. Ella estaba fascinada con los corgis desde muy chiquita, cuando su padre compró a Dookie, el primer corgi real. Al igual que Elizabeth, Susan fue la matriarca de la dinastía, que duró diez generaciones, de hasta 30 corgis! Los perros de la reina hoy, son un emblema de la realeza.

Cuando la Reina se casó con Felipe, decidieron llevar a Susan en su luna de miel. Ese es el amor que le tiene Her Majesty the Queen, Elizabeth II a sus perros. Y por eso la consideramos la reina pet friendly!

Su vida juntos

En Buckingham, el palacio de la reina, los perros siempre corren por delante de ella, entonces anticipan siempre su llegada. Se sabe que cuando llegan los perros, viene ella también. Uno de los protocolos del palacio es que es staff nunca debe darle la espalda a la Reina, y con el ingreso de los perros en cualquier habitación, todo el staff sabe que la Reina viene detrás y pueden ponerse “en posición”. No se bromea sobre los corgis y de hecho un miembro de staff fue despedido por hacer un chiste imitando servir alcohol en el recipiente de agua de uno de los perros.

Los corgis tienen su propio staff, tal como la reina. El chef real además de cocinar para la realeza, tiene que cocinar para los caninos algo diferente cada día (tiene un calendario). Una vez, uno de ellos se peleo con otro de los perros del palacio, y despues de semejante incidente, hubo que contratar un psicólogo canino.

Dónde viven los corgis de la reina?

En el palacio tienen una habitación cerca a la de la Reina, la llaman “la habitación de los corgis”, aunque en ella duermen los alrededor de 15 perros corgis, dorgis y cocker spaniels de la Reina. Esta habitación tiene “canastas elevadas” para cada uno de los canes, esto hace que la Reina los tenga a su alcance para acariciarlos, además para que los perros no duerman en el piso. Nunca lo admitiría la realeza, pero sí el staff del palacio: el tenerlos en canastas elevadas también facilita mucho la hora de la limpieza de la habitación de los corgis. 

Está terminantemente prohibido darles de comer de la mesa. Son perros muy educados. Y la vida pet friendly requiere que así lo sea. El chef junto con el veterinario se encargan de realizarles una dieta estricta con todos los nutrientes necesarios. Y cada uno de los perros tiene su propio plato de comida con nombre. Lo interesante es que cada uno de ellos sabe cuál es su plato y no comen si no es del suyo. La reina ama darles treats, aunque estos tienen que ser siempre sanos y naturales. Además, en Navidad, cada uno de los perros tienen su propia media con su nombre colgada en la repisa de la chimenea, y en dicha media, cada uno tiene su treat de Navidad.

El cementerio real canino está en la residencia real de Norfolk: uno de los collies de la Reina Victoria fue enterrado allí y desde el fallecimiento de Susan, que también fue enterrada allí, también es el lugar de descanso de los perros que ya no los acompañan. En el año 2015 la Reina decidió no criar más corgis, dado que no quiere que la sobrevivan y sean una carga para los demás, y en el 2018 falleció Willow, de 15 años, el último corgi de la Reina debido a un cáncer. Aún así, siguen viviendo un par de corgis en el palacio.

Una vez sin corgis, en 2019 la Reina dio el aval para realizar una película animada llamada “Los corgis de la Reina”.

By @michellemaidare